Maquillarse, darse un largo baño con sales o aplicarse crema hidratante después de un duro día de trabajo, deberían ser acciones divertidas o relajantes pero, sobre todo, inofensivas. Por desgracia, el uso de animales para la experimentación de productos de belleza, hacen que algo tan sencillo como aplicarse rimmel o lavarse el pelo se convierta en un infierno para millones de animales.

Y sí. He dicho millones.Gatos, hámsters, ratas, cerdos, ranas, perros, conejos, monos… Todos fueron torturados y asesinados para que tú pudieras hacerte el selfie de turno.

¿Suena extremista? Quizá. ¿Es la realidad? Lo es.

“La irritación de la piel o los ojos, sensibilización de la piel (provocar alergias), toxicidad (envenenamiento), mutagenicidad (daño genético), teratogenia (defectos de nacimiento), carcinogenicidad (causar cáncer), daño genético embrionario o fetal, toxicocinética (para estudiar la absorción, metabolización, distribución y excreción de las sustancias químicas).”

Anima naturalis

0576.Biosearch_5F00_dermal
peta.org

El 23 de enero concluyó el juicio contra el criadero Green Hill en Italia, mejor conocido por ser el lugar de donde fueron rescatados docenas de perros de raza Beagle que se vendían a laboratorios de vivisección en toda Europa. Algunos de los 3 mil perros que fueron decomisados por la justicia italiana fueron adoptados y permanecieron en casas particulares con nuevos tutores. Tres empleados del criadero recibieron una sentencia de cárcel por casi 2 años y la fábrica fue cerrada.

Sinembargo.mx

Lo que dice la ley

La industria cosmética (con permiso de la farmacéutica y la alimentaria) ha sido una de las más demonizadas en los últimos años a causa un sinfín de costumbres y prácticas poco éticas y de políticas medioambientales penosas o, directamente, inexistentes.

Pero por suerte, y gracias a la lucha de organizaciones y asociaciones animalistas de todo el mundo y al apoyo de algunos empresarios y empresarias con cabeza, la industria cosmética ha evolucionado de forma impresionante durante los últimos años.

En febrero del 2003, la Unión Europea aprobó por fin una ley contra el testado cosmético en animales y que se implementó el 11 de marzo de 2009. Fecha a partir de la cual, se convirtió en ilegal, entre otras cosas:

  • Experimentar ingredientes cosméticos en animales, en cualquier lugar de la UE.
  • La venta o importación a la UE de cualquier ingrediente para usar en cosméticos (o los cosméticos finalizados) experimentados en animales después de esa fecha. Y además, se prohíben la venta y el marketing de estos productos.

00e828ff8b1971df452670e4043cfd08--stop-animal-testing-siamese-cats.jpg

¿Quiere decir esto que todo lo que compro en España es cruelty free? Pues bueno, ya nos gustaría.

Quien hace la ley hace la trampa. Por ejemplo, la explotación infantil es ilegal. Y existen unos derechos universales del trabajador que, en teoría, todo bicho viviente debe respetar, al menos en Europa, ¿verdad? Bien, pues supongo que a estas alturas de la vida, no te sorprenderás si te digo que grandes marcas como Nike, Adidas, Zara o Bershka establecen la fabricación de sus productos en Asia y se las pasan por el forro. Y tan tranquilamente. Sin cometer una sola irregularidad.

Así que el fin de semana, salimos por Gran Vía a hacer unas compras y volvemos a casa con dos bolsas llenas de esclavitud.

Y lo mismo sucede con la industria cosmética. Si el laboratorio de turno se encuentra fuera de la UE, ahí lo llevas.

Pero… la experimentación en animales es necesaria, ¿no?

Pues hombre, igual hace un siglo, sí. A día de hoy, ni si quiera está requerido por ley que el producto en cuestión haya sido probado antes en animales. De hecho, el único requerimiento legal necesario para comercializar un producto es que se demuestre que es seguro mediante testados dermatológicos, por ejemplo.

Hasta la fecha, se ha estimado que existen más de 15.000 ingredientes probados como seguros para el ser humano.

Y digo yo, que a lo mejor 15.000 (ingrediente arriba ingrediente abajo), son más que suficientes como para seguir trabajando sobre ellos, combinando y descubriendo, sin necesidad de envenenar a un solo animal más. ¿No te parece?

animales-mileniales-codigo-nuevo
codigonuevo.com

No es oro todo lo que reluce

Llegados a este punto del artículo, con un poco de suerte, he conseguido convencerte de que torturar, envenenar y asesinar animales para que puedas pintarte los labios es una mierda. Y quizá estés pensando en esa crema que viste el otro día en cuya etiqueta decía «no experimentamos en animales».

Haces bien, pero espera, no vayas corriendo a comprarla todavía.

Porque las frases «no experimentamos en animales» y «no aprobamos la experimentación en animales» no garantizan demasiado.

Estas etiquetas indican que la compañía no hace pruebas en animales, sin más. Pero tampoco comprueba que los ingredientes que usan no hayan sido probados en animales. Ni asegura que no haya subcontratado a otra compañía productora para que le fabrique los susodichos, de modo que no hay forma de saber si ese tercero experimenta o no experimenta con ellos.

Si además, la marca en cuestión vende en China, olvídate de ella. En China, por ley, todos los productos deben ser testados en animales antes de su venta.

¡Joder, ¿y entonces qué quieres que haga?! Pues leer. Nada más y nada menos. Infórmate y busca la etiqueta 100% Cruelty Free.

cf-600x250.jpg

Sobre la etiqueta 100% Cruelty Free

Ten en cuenta que, para que un producto o empresa sea certificado como 100% cruelty free, deberá cumplir con estos criterios mínimos:

  • Los ingredientes utilizados no han sido testados en animales
  • Los productos de la compañía no han sido testados en animales
  • En ningún momento un producto se ha experimentado en animales por terceros
  • La compañía tiene acuerdos con sus proveedores de ingredientes sobre no experimentar en animales
  • Los productos de la compañía no requieren en ningún lugar la experimentación en animales
  • La empresa matriz o el epicentro empresarial de una marca o compañía no experimenta en animales

Esto ya empieza a garantizar algo más, ¿verdad?

Bonus round

En el próximo post te hablaré de marcas que no testan en animales, muchas de ellas basadas en productos naturales. Pero, mientras tanto, si quieres saber más sobre el tema, te recomiendo estos recursos: